sábado, 11 de junio de 2016

El vecino contemporáneo, Bauman (pequeño fragmento)

La idea del vecino se asocia por lo general con la persona que vive en la puerta contigua o por lo menos a una distancia corta de donde vivimos nosotros. Al hablar de “vecindario”, normalmente consideramos un área relativamente chica, poblada por gente que conocemos o de la que sabemos algo, y que también, probablemente, nos conoce o al menos puede saber de nuestra existencia: personas con las que podemos encontrarnos al salir.


Loa vecinos están donde están, pueden llegar e instalarse o irse, arraigarse o arrancarse de raíz del vecindario por iniciativa y voluntad propias (es decir, no nuestra voluntad). Están allí, se da así, y nos guste o no, nos parezca lo que nos parezca, es poco lo que podemos hacer para cambiar la cuestión. Son un conjunto diverso; algunos parecen agradables y divertidos, otros sospechosos, ruidosos, molestos o directamente repulsivos. Nos alegra que algunos sean vecinos nuestros, podemos aceptar que otros estén por aquí, y al resto preferiríamos sacárnoslos de encima.  

                                                                                                              Juan Alejandro Rodriguez
                                                                                                              ID: 1067233 

No hay comentarios:

Publicar un comentario